Alimentos que debe evitar sí tiene problemas renales
Evitar ciertos alimentos y hacer algunos cambios en la dieta ayuda a prevenir la formación de piedras en el riñón y controlar sus molestos síntomas. Beber mucha agua, comer cítricos y reducir la sal, las proteínas y los oxalatos en tu menú, pueden marcar una gran diferencia si padeces esta condición.
Los cálculos renales o piedras en el riñón son una condición dolorosa y común que ocurre cuando ciertas sustancias en la orina, como el calcio, el oxalato o el ácido úrico, se concentran y solidifican. Dado que el tracto urinario no está diseñado para expulsar materia sólida, cuando esto ocurre, resulta muy molesto.
Consultar a un profesional de la salud permite identificar factores de riesgo específicos, recibir el tratamiento adecuado y recomendaciones personalizadas. En su abordaje, la dieta puede ser una herramienta eficaz para controlarlos y prevenirlos. Estos son los cinco tipos de alimentos prohibidos si tienes piedras en el riñón.
1. Alimentos ricos en oxalato
El oxalato es un compuesto que se encuentra en numerosos alimentos y puede favorecer la formación de piedras en el riñón. Cuando esta sustancia se consume en grandes cantidades puede combinarse con el calcio en la orina, formando cristales que se convierten en cálculos de oxalato de calcio.
Estos son algunos alimentos que lo contienen:
Té
Maní
Acelga
Batatas
Ruibarbo
Espinacas
Remolachas
Salvado de trigo
Nueces y semillas
Cacao y chocolate
Consejos a tener en cuenta
Si ya has tenido cálculos renales, puede ser beneficioso limitar o evitar los alimentos con alto contenido de oxalato. Consulta con un profesional de la salud para determinar la cantidad adecuada para tu dieta.
Si consumes alguno de los alimentos de la lista, acompáñalos con una fuente de calcio. Esto ayudará a que el oxalato se una al mineral durante la digestión, reduciendo la cantidad que llega a los riñones.
Para disminuir la ingesta de este componente, puedes sustituir ciertos ingredientes por opciones que no lo contengan. Verduras como el brócoli y los guisantes o frutos secos como las nueces de macadamia y el coco, son alternativas más apropiadas.
2. Sodio
El consumo excesivo de sodio puede incrementar la cantidad de calcio en la orina, lo que favorece la formación de cálculos renales. Esto se debe a que ambos elementos comparten el mismo transporte en los riñones; así, una alta ingesta del primero puede aumentar la excreción del segundo.
Además del sodio que contiene la sal de mesa que agregas a tus preparaciones, platillos y ensaladas, este elemento está presente en otros alimentos que debes evitar:
Comida rápida
Snacks salados
Sopas enlatadas
Alimentos en conserva
Carnes procesadas y embutidos
Además, este elemento está presente en muchos condimentos, aderezos y comidas ultraprocesadas, envasadas o rápidas. Incluso, la comida de restaurante— incluyendo los menús normales— pueden contener niveles elevados de sodio.
Una dieta alta en sodio, entre otras consecuencias negativas para la salud, puede elevar las probabilidades de desarrollar nuevos cálculos renales.
Consejos para reducir su consumo
Para reducir la ingesta de sodio y, por ende, el riesgo de piedras en el riñón, considera lo siguiente:
Cocina en casa y evita los ultraprocesados.
Usa hierbas y especias para dar sabor a tus comidas en lugar de sal.
Pide que no agreguen sal a tu comida cuando salgas a comer afuera.
Elige alimentos frescos y sin procesar, como frutas, verduras y carnes no procesadas.
Revisa las etiquetas al comprar alimentos procesados para ver el contenido de sodio y elige las opciones con niveles más bajos.
Habla con tu médico o nutricionista sobre la cantidad adecuada de sodio en tu dieta y sigue sus consejos para reducir su consumo.
3. Proteínas animales en exceso
Comer muchas proteínas animales puede aumentar los niveles de ácido úrico en la orina. Este elemento contribuye a la formación de piedras de ácido úrico, un tipo muy común de cálculo renal.
Además, una alta ingesta de proteínas animales reduce la cantidad de citrato en la orina, una sustancia que ayuda a prevenir la formación de piedras. Por ello, es importante moderar su consumo, sobre todo si ya hay antecedentes de desarrollar este problema.
La reducción de citrato y el aumento de ácido úrico crean un entorno más propicio para la formación de piedras en el riñón.
Para disminuir el riesgo de cálculos de ácido úrico, es recomendable reducir el consumo de los siguientes alimentos:
Carne roja
Pollo con piel
Pescados grasos
Huevos en exceso
Productos lácteos altos en grasa
El consumo de leche y huevo en cantidades moderadas no produce piedras en los riñones y es posible incluirlos en el menú de quienes padecen este problema, siempre y cuando formen parte de una dieta equilibrada y controlada en proteínas.
¿Qué tener en cuenta para reducir las proteínas animales?
Para mantener una ingesta adecuada de proteínas sin aumentar el riesgo de cálculos renales, se pueden incorporar alimentos vegetales que las contengan y opciones animales más saludables. Algunas alternativas incluyen:
Tofu
Maní
Quinoa
Nueces
Frijoles
Lentejas
Hummus
Pistachos
Anacardos
Almendras
Yogur griego
Leche de soja
Carnes magras
Pescado blanco
Guisantes secos
Semillas de chía
Semillas de girasol
Habla con un profesional de la salud para determinar la cantidad adecuada de proteína diaria y la proporción que debe provenir de fuentes animales y vegetales. Un dietista puede ofrecerte recomendaciones personalizadas para asegurarse de que obtienes la cantidad suficiente de este macronutriente sin aumentar el riesgo de formación de cálculos renales.
Debes encontrar un equilibrio en la ingesta de proteínas para mantener una buena salud y disminuir el riesgo de piedras renales.
4. Bebidas azucaradas y con cafeína
El consumo de bebidas azucaradas o con cafeína, como refrescos, café y té, puede deshidratar el cuerpo y aumentar el riesgo de formación de piedras en el riñón. Estos líquidos además pueden incrementar los niveles de ciertas sustancias en la orina que favorecen la formación de cálculos renales.
Para mantenerte bien hidratado y disminuir el riesgo de formación de piedras en el riñón, evita las siguientes bebidas:
Refrescos
Café en exceso
Jugos azucarados
Bebidas alcohólicas
Bebidas energéticas
Té negro y verde en exceso
El alcohol aumenta la producción de ácido úrico y puede deshidratar el cuerpo, lo que facilita la formación de cálculos.
Los azúcares añadidos, como la sacarosa y la fructosa, también aumentan el riesgo de cálculos renales. Es importante controlar la cantidad que se consume en alimentos procesados, tales como dulces, pasteles, frutas enlatadas, refrescos y jugos.
Alternativas saludables
Mantenerte bien hidratado evita que se concentren y cristalicen las sustancias que forman piedras en los riñones. El agua será tu mejor aliada para dar a tu cuerpo la cantidad de líquido que necesita.
Si prefieres las infusiones, elige las de hierbas sin cafeína. Si en cambio buscas algo más refrescante, prepara agua con limón, que ayuda a aumentar la ingesta de líquidos y a prevenir los cálculos debido a su contenido de citrato.
Además, se debe tener cuidado con los diferentes nombres de los azúcares añadidos, como jarabe de maíz, fructosa cristalizada, miel, néctar de agave, jarabe de arroz integral y azúcar de caña. Leer las etiquetas te ayudará a saber qué estas consumiendo.
5. Alimentos con alto contenido de purinas
Las purinas son compuestos presentes en ciertos alimentos, sobre todo en las proteínas animales. Las dietas ricas en esta sustancia dan lugar al aumento del ácido úrico, bajo volumen de orina y pH urinario bajo, situaciones que exacerban la formación de cálculos renales.
Para reducir el riesgo de desarrollar estas piedras, es importante limitar el consumo de los alimentos que las contienen:
Carne de caza
Salsas y caldos de carne
Mariscos, sardinas y anchoas
Alcohol, sobre todo la cerveza
Vísceras como hígado, riñones y otros órganos internos
¿Qué tener en cuenta?
Para prevenir la formación de ácido úrico, puedes reemplazar los ingredientes enlistados por opciones proteicas que no contengan purinas. Los frijoles, lentejas, tofu, el pollo sin piel y el pescado blanco son algunas opciones más saludables. Además, cuando prepares caldos y salsas, hazlos a base de vegetales.
Cuidado con los suplementos
El uso de algunos suplementos vitamínicos y minerales podría tener un impacto en la formación de cálculos renales en algunas personas. Pero no todos tienen este efecto. Estos son algunos de los que debes considerar:
Vitamina C: la ingesta diaria recomendada es de 60 miligramos por día, pero si se consumen altas dosis puede incrementar los niveles de oxalato en el cuerpo, aumentando el riesgo de cálculos renales.
Vitamina D: una dosis adecuada es importante para la salud ósea y general, pero su exceso puede influir en la formación de cálculos renales. Al aumentar los niveles de calcio en la sangre, puede llevar a una mayor excreción en la orina y su cristalización.
Suplementos de calcio: aunque la ingesta de calcio es necesaria para una buena salud ósea, renal y general, los suplementos deben ser prescritos y supervisados por un médico o un nutricionista, ya que pueden aumentar la probabilidad de formación de piedras en algunas personas.
Siempre es recomendable consultar con un médico o dietista antes de iniciar cualquier tipo de suplementación para evitar complicaciones.
Las vitaminas del complejo B, que incluyen tiamina, riboflavina, niacina, B6 y B12, no se han demostrado ser dañinas para las personas con cálculos renales. De hecho, la vitamina B6 puede ser beneficiosa para quienes tienen niveles altos de oxalato en la orina.
Otros consejos para prevenir los cálculos en los riñones
Aunque existen varios trucos para expulsar las piedras renales, lo ideal es evitar que se formen. Haberlas tenido alguna vez aumenta el riesgo de que vuelvan a aparecer, a menos que hagas algo para prevenirlas. Esto significa tomar los medicamentos que te recetaron y controlar lo que comes y bebes.
Algunas prácticas, cuidados y alimentos buenos para el riñón pueden contribuir a mantener su salud:
No olvides orinar con frecuencia para evitar la concentración de minerales que pueden formar cálculos.
Incorpora frutas cítricas a tu dieta que contienen citrato, como limones, naranjas y pomelos, pueden ayudar a reducir o bloquear la formación de cálculos renales.
Asegúrate de mantenerte bien hidratado, sobre todo durante actividades que causan sudoración excesiva, como el ejercicio intenso o en días calurosos. Beber entre 2 y 3 litros de agua al día promueve una adecuada producción de orina y previene la acumulación de minerales en el tracto urinario.
También, aunque puedas creer que el calcio contribuye a la formación de cálculos, en realidad, en cantidades adecuadas, previene su formación al unirse a otras sustancias en el tracto digestivo. Intenta obtenerlo de alimentos como lácteos, legumbres y vegetales de hojas verdes, en lugar de depender de suplementos.
Por último, no dudes en visitar a tu médico o un dietista para obtener recomendaciones personalizadas y recibir el asesoramiento adecuado sobre cómo cuidar tus riñones.
Con información de Mejor con Salud