Insólito divorcio de Mary-Kate Olsen y Olivier Sarkozy
Mary-Kate Olsen (34 años) y Olivier Sarkozy (51) pusieron fin a su matrimonio el pasado mes de mayo tras cinco años de relación. Y, tal y como aseguraron numerosos medios ingleses, la separación no ha sido precisamente amistosa.
En el mes de abril, en medio del confinamiento provocado por la pandemia por el coronavirus, la protagonista de la famosa serie «Padres forzosos» solicitó el divorcio, pero se lo denegaron por las circunstancias excepcionales, ya que en aquel momento los Tribunales no aceptaban peticiones de divorcio.
Su todavía esposo intentó echarla de la casa que tiene alquilada en Nueva York, pero la diseñadora logró que se le permitiese quedarse hasta el 30 de mayo porque era prácticamente imposible encontrar piso en plena pandemia. En la denuncia presentada ante la Corte Suprema de Nueva York el 17 de abril, Mary-Kate Olsen informaba que su esposo le había rescindido el contrato de arrendamiento, sin su consentimiento, en la residencia de Nueva York en la que habían convivido: «Esta solicitud es una emergencia porque mi esposo espera que me mude de nuestra casa el lunes 18 de mayo de 2020 en medio de la pandemia. Estoy horrorizada».
Esta semana por fin la pareja ha podido firmar un acuerdo de divorcio y lo han hecho a través de una videoconferencia. En un momento en el que el mundo entero se ha paralizado, la única solución es comunicarse de forma virtual. Es por ello que la pareja ha escogido la aplicación de Zoom para dar carpetazo a su matrimonio. Y para la ocasión, todos los presentes acudieron vestidos de negro, tal y como se puede ver en una captura de pantalla difundida a través de las redes sociales.
Por lo que se ha podido saber hasta el momento, ambas partes han llegado a un acuerdo, tal y como confirmó el abogado de Sarkozy y lo corroboró también el abogado de Olsen. «Vamos a terminar su divorcio», sentenció el juez al otro lado de la pantalla durante su última reunión.
Fue en 2015 cuando Mary-Kate Olsen y Olivier Sarkozy se dieron el «sí, quiero» en una ceremonia íntima celebrada en Nueva York ante no más de 50 invitados. Hace no mucho la intención de una de las gemelas más famosas de la televisión era quedarse embarazada para formar una familia junto a Sarkozy.
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