Los múltiples beneficios de los venezolanos que entren a EEUU con “parole humanitario”
Cientos de venezolanos ya se encuentran en territorio estadounidense bajo el nuevo Programa de Permiso Humanitario implementado por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés), y podrán acceder a varios servicios del gobierno durante los dos años de duración del ‘parole’.
Hasta el 31 de octubre, más de 3.800 venezolanos habían recibido aprobación para viajar a Estados Unidos y 490 habían entrado al país de manera legal, según cifras reveladas por DHS. La administración de Joe Biden puso como límite al programa la entrada de 24.000 venezolanos.
Estos son algunos de los servicios a los que tendrán acceso los venezolanos:
Permiso de trabajo
Una vez se les conceda entrada al país en un aeropuerto de EEUU, los venezolanos son elegibles para aplicar a un permiso de trabajo en la plataforma del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS). El formulario correspondiente es el I-765, y su costo de radicación es de 410 dólares. Con este, podrán acceder a empleos durante los dos años del ‘parole’.
Tarjeta de Seguro Social
Los venezolanos con ‘parole’ humanitario podrán ser asignados un número de seguro social (SSN) que se utiliza para informar sus salarios al gobierno y para determinar la elegibilidad para los beneficios del Seguro Social, según USCIS.
Una de las maneras de adquirirlo es a través del formulario de permiso de trabajo, en la sección 2. Una vez otorgada la autorización de trabajo, USCIS enviará los datos a la Administración del Seguro Social (SSA), y la SSA le asignará un SSN y le emitirá una tarjeta.
La segunda manera es solictar el SSN a través de la página de internet de la SSA, luego de obtener el permiso de empleo.
Acceso al mercado de planes médicos
El gobierno federal y múltiples estados tienen disponible mercados en línea de planes médicos para adquirir un seguro en el territorio que se encuentre. Los mercados ofrecen dos tipos de cobertura, una en la que se debe pagar y se obtiene créditos fiscales o la cobertura a través de Medicaid, que es el programa federal de gobierno de EEUU para ayudar en el cuidado de salud a las personas de escasos recursos, así como el Programa de Seguro Médico para Niños (CHIP), subvencionados ambos por el gobierno.
Los costos y planes varían según el ingreso de las personas y el estado en el que se encuentre.
“En algunos casos, los niños venezolanos menores de 19 años que vienen a los EEUU bajo el Programa de Parole Humanitario serán elegibles para CHIP o Medicaid, pero dependerá del estado”, dijo un portavoz de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS) a la VOA.
Adultos venezolanos no pueden acceder a beneficios de Medicaid pues se requiere una espera de cinco años para ser elegible desde que se les otorga el ‘parole’ humanitario. Sin embargo, menores de 21 años y personas embarazadas, pueden ser elegibles para los beneficios completos de Medicaid, según CMS.
“Podría ser Medicaid si califican de acuerdo a los requerimientos de cada estado, esto es mas complicado de determinar. Sin embargo, con el crédito fiscal la póliza privada puede costar cero, todo depende del nivel de ingresos que vayan a tener”, explicó a VOA María Díaz, presidenta de Venezuelan American Alliance, una organización con sede en Miami que ayuda a los venezolanos en EEUU.
Asistencia para compra de alimentos
Venezolanos bajo el ‘parole’ humanitario podrían acceder a los beneficios del Programa Especial de Nutrición Suplementaria para Mujeres, Infantes y Niños (WIC), y para el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), anteriormente conocido como el programa de cupones.
En el caso del WIC, los solicitantes “deberán cumplir con los criterios básicos de elegibilidad, incluida la categoría (mujer embarazada, en posparto o lactando, bebé o niño de hasta 5 años), ingresos, residencia e identidad. Las poblaciones especiales, incluidas las personas desplazadas o sin hogar, tienen flexibilidades adicionales para cumplir con estos requisitos de elegibilidad”, dijo a VOA un portavoz del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA).
Agencias estatales tienen disponibles números telefónicos para aplicar al servicio en el lugar que se encuentre.
Para el SNAP, además de haber recibido la condición de ‘parole’, únicamente podrán acceder los venezolanos que sean menores de 18 años, ciegos o discapacitados. Este beneficio se solicita en las agencias correspondientes a cada estado.
¿Cómo buscar empleo?
La iniciativa Welcome.US, que busca incentivar a estadoundenses a patrocinar a venezolanos a través del programa de ‘parole’ humanitario, tiene disponible un portal para beneficiarios en el que los conecta con oportunidades de trabajo y compañías en busca de migrantes como ellos.
A través de la Welcome Employment Exchange, los beneficiarios podrán encontrar puestos vacantes en una variedad de niveles y postularse para los trabajos que mejor se adapten a sus habilidades.
¿Cuánto debe esperar para solicitar los servicios?
Los servicios y beneficios se pueden solicitar inmediatamente después de la entrada a EEUU.
¿A qué NO tienen acceso los venezolanos bajo ‘parole’ humanitario?
La Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR) del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU (HHS), ofrece a migrantes afganos y ucranianos, múltiples beneficios bajo sus respectivos programas de ‘parole’ humanitario. Sin embargo, dichos servicios no están disponibles para venezolanos debido a que se necesita autorización y fondos del Congreso, dijo un portavoz de la agencia a la VOA.
Algunos de los beneficios que cubre la ORR y que no aplican a venezolanos son asistencia en efectivo, asistencia médica, preparación para el empleo, clases de inglés, mentoría a jóvenes y asistencia técnica para emprendedores.
“Los venezolanos en parole humanitario, como muchas otras personas que vienen a los EEUU en busca de asilo, tienen que abrirse camino sin esta asistencia, lo que puede ser muy difícil mientras esperan para ser elegibles para la autorización de trabajo. Incluso una vez que los inmigrantes tienen autorización de trabajo, muchos luchan por encontrar trabajos que paguen lo suficiente para mantener sus vidas en los Estados Unidos”, explicó a VOA Julia Gelatt, analista de políticas senior del Instituto de Políticas Migratorias.
Vía La Patilla