Nikki Haley busca frenar a Donald Trump en New Hampshire, donde el expresidente vuelve a ser favorito
Con Ron DeSantis fuera de la contienda, la exembajadora ante las Naciones Unidas y exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, buscará frenar el martes, en New Hampshire, la aparente inevitabilidad de la precandidatura presidencial republicana de Donald Trump.
Si Haley fracasa en su intento de vencer a Trump en una contienda en que puede haber un alto porcentaje de participación de independientes, los expertos sostienen que los opositores del expresidente pueden quedarse sin otra ventana en estas primarias para derrotarle.
Trump – imputado de 91 cargos criminales, incluyendo el intento por revertir el resultado de las elecciones de 2020 y la incitación al acto de insurrección del 6 de enero de 2021, en contra del Congreso-, se ha ocupado de llevar a New Hampshire a políticos republicanos de Carolina del Sur, donde el 24 de febrero tendrá lugar el cuarto evento republicano.
“Necesitamos unirnos detrás de un candidato, y ese candidato es Trump”, dijo el senador y exprecandidato presidencial republicano Tim Scott, quien, a pesar de haber sido electo por Carolina del Sur y originalmente nombrado por Haley, se integró a la campaña del pasado presidente de Estados Unidos.
La más reciente encuesta, publicada el domingo por CNN y la Universidad de New Hampshire, otorga a Trump 50% de respaldo entre los electores republicanos que se proponen participar de la primaria del martes, frente al 39% de Haley.Ron DeSantis, gobernador de Florida y quien suspendió su campaña el domingo en la tarde, solo obtenía 6% de apoyo.
Esa misma encuesta, a principios de mes, tenía a Trump con 39% y a Haley con 32%, en momentos en que había más precandidatos.
Asimismo, una encuesta de la semana pasada, de la Universidad de Suffolk y el periódico Boston Globe, otorgó a Trump 55% y a Haley 36%. DeSantis volvía a quedarse en 6%. “Ni hablo sobre DeSantis”, dijo el expresidente Trump durante uno de sus eventos del fin de semana en New Hampshire, antes de la salida del gobernador de Florida, quien, en su mensaje de retirada, lo endosó.
El expresidente ha enfilado sus críticas recientes hacia Haley, su oponente de fuerza en New Hampshire, incluso con ataques que se han considerado racistas, como alegar falsamente que no es ciudadana de Estados Unidos, por sus padres ser de la India, y llamarla “Nimbra”, en alusión a su primer nombre Nimarata.
Haley – embajadora de Estados Unidos en las Naciones Unidas durante la presidencia de Trump-, siempre ha sido conocida por segundo nombre, Nikki, que significa “la pequeña” en punjabí.
La exgobernadora Haley, por su parte, ha aludido a la edad de Trump, 77 años, y el presidente Joe Biden, 81, para insistir en que Estados Unidos quiere mirar hacia el futuro.
Con informacion de El Clarin
